Hoy os quiero mostrar el trabajo que hemos llevado en el sótano de una vivienda unifamiliar. De entrada, nos encontramos con un espacio de una cochera adaptado como sala polivalente con zona de estar, gimnasio y una barra de obra que el cliente quería conservar. A continuación podéis ver cuál era el estado inicial:
Para realizar el proyecto estudiamos la distribución general, para organizar mejor los distintos espacios que necesitaba la familia: zona de estar, comedor, barra y gimnasio. Por lo que respecta al mobiliario, se retiró todo el existente y ubicamos, en la zona de estar, un sofá rinconera con tapicería antimanchas en un tono neutro. También elegimos un mueble auxiliar y una vitrina en madera maciza de pino lacada en color rojo, más atrevido y simpático. Respecto a las sillas y taburetes, las coordinamos en beige y rojo para darle contraste al papel pintado con motivos florales en tono azul verdoso que pusimos en la pared.
El material de la mesa de la zona de comedor se eligió pensando en poder sacarla también al exterior, ya que fuera tenemos la piscina. Así, está realizada con un pie en polibutileno y la tapadera en un HPL, que es un fenólico.
También elegimos unas mesas auxiliares para la zona del sofá que aportan dinamismo porque son de distintas alturas y están hechas en el mismo material que la mesa del comedor, por lo que también se pueden sacar al exterior. Hemos completado con unos puf tapizados en una polipiel en azul cobalto que le hacen un guiño al papel pintado y que suponen más espacio para sentarse en caso de recibir visitas.
De la barra original hemos eliminado la piedra frontal, se ha pintado el ladrillo en color blanco y se ha realizado un tablero tapizado en una polipiel más decorativa, con una textura adiamantada.
La zona de gimnasio, con cinta andadora y bicicletas estáticas, se ha reforzado con un espejo que da sensación de amplitud y además es útil a la hora de realizar ejercicio. Esos espejos los hemos dinamizado con unas piezas de césped artificial para romper la típica luna grande de los gimnasios.
Como no podía ser de otra forma, realizamos un estudio de iluminación general antes de realizar el proyecto. Intentamos ocultar bajantes, tuberías y cableado realizando un falso techo de pladur liso con perfilería oculta. Se alisaron todas las paredes y se cambió el suelo, eligiendo para la ocasión un porcelánico imitación madera en tono neutro. Para la zona de estar se eligió una iluminación menos intensa, mientras que en el resto de la estancia se ubicaron pantallas cuadradas de 60×60 empotradas en el falso techo, que dan sensación de lucernario pero con un consumo muy bajo. Asimismo, se ubicaron unas lámparas auxiliares sobre la barra y la mesa de comedor para dar un ambiente más acogedor e íntimo.
Respecto a las cortinas, están realizadas con distintos tejidos. El visillo es transparente y hace un dibujo tipo coralino en crudo y las patas del panel japonés están realizadas en un tejido con textura y un terciopelo en tono rojo vino tinto en la parte inferior, rematado con una cinta plisada que da un toque de distinción.
En definitiva, ha sido una renovación completa del espacio que, no solo le ha dado un aire más actual, sino que también lo ha convertido en mucho más funcional.
¿Tú también necesitas una reforma en tu hogar? ¡No dudes en contactarme!
#AnaMesaInteriorista